Las jaulas de reposición permiten cuidar en buenas condiciones las futuras reproductoras, donde las hembras están sometidas a un ritmo semi-intenso de 42 días de reproducción.
Alcanzando en ocasiones los 8 partos al año. He aquí la importancia que cobra la renovación de las reproductoras.
Los huecos destinados a la reposición, permiten el cuidado de las futuras reproductoras en óptimas condiciones.
Las hembras son introducidas al final del periodo de cebo. Inseminadas en esta misma jaula y son retiradas algunos días antes del parto.
Los habitáculos individuales diseñados para alojar a cada futura madre hasta su monta o inseminación, miden 25x43cm huecos.
Con un total de 32 habitáculos.